CAPÍTULO 22

 

“A DIEZ PRUEBAS FUÉ SOMETIDO NUESTRO PATRIARCA ABRAHAM, SUPERÁNDOLAS TODAS; LO QUE NOS DEMUESTRA CUÁN GRANDE HABÍA SIDO EL AMOR DE ABRAHAM, NUESTRO PATRIARCA, PARA CON D’S.”

Tratado de Principios, Cap Y. Mishnáh 4.

 

Es como prueba de fe y de amor que el pueblo de Israel ha entendido siempre la “Parashát Hahakedáh” — ligaduras de Itshak.

Esta parasháh es toda la fortaleza de Israel y el mérito de éste ante su Padre en los cielos y por ello forma parte de nuestras oraciones diarias; por lo tanto es necesario ampliar, profundizar e investigar en ella más que en otras parashiot” (Abarbanel)

Después de los últimos eventos, después de haberse asentado Abraham en la tierra de los Filisteos por muchos días y cuando la quietud parece definitivamente sobrevenir a la ancianidad de Abraham y de Saráh, he aquí un sorpresivo giro de los eventos. “Elohim sometió a prueba a Abraham...” El lector, afortunado, es informado de que es una prueba; el protagonista Abraham sabe, únicamente, que es un pedido, de D’s. La fe de Abraham sí está sometida a prueba. Abraham ha decidido cómo debe terminar la prueba. Los elementos que lleva consigo así lo demuestran. La Misericordia Divina decidirá distinto.

Sería disminuir la intensidad de este pedido el embarcarse en especulaciones racionales o históricas para justificarlo pretendiendo develar sus ocultos designios.

Abraham, hombre de fe, en este punto culminante de su vida al servicio de D’s, no racionaliza sino que está por encima de la razón.

No se dirige en plegaria a D’s por la vida de su hijo como lo hiciera por los perversos habitantes de Sodoma y Gomorra.

La oración en favor de los habitantes de estas ciudades había sido una osadía, una valentía espiritual.

La oración en favor de su hijo Itshak — pedido por D’s — habría sido un titubeo, tal vez una duda. Pero ello no ocurre.

La respuesta de Abraham al nítido pedido manifiesto de D’s no se dió en palabras, ni en un pedido de aclaración a D’s; después de esa visión nocturna, que inferimos, Abraham madruga y vemos solamente acción, ni una palabra.

El camino hacia la tierra de Moriáh es largo, lleva tres días.

Los pensamientos de Abraham durante ese período no nos han sido revelados; solamente podemos suponerlos. Itshak era el hijo que con su nacimiento provocó risas y regocijo. Su mismo nombre lo indica. ¿Ese regocijo se tornará en llanto perpetuo?

Su actitud, en cambio, es clara, avanza hacia el lugar que ni siquiera conoce, pero que está seguro de encontrar.

El hombre de fe sabe encontrar, sabe responder, evita las preguntas.

La promesa anterior donde D’s asegura que la descendencia de Abraham será a través de Itshak parece no contradecir el pedido sino más bien reforzar la intensidad y el dramatismo del mismo. La perplejidad de Abraham ha de ser magna como lo es su respuesta.

No es la primera prueba de Abraham. Todavía escuchamos el eco del ìê ìê îàøöê åîîåìãúê åîáéú àáéê — vete de tu país y de tu lugar natal y de la casa de tu padre...

Esa prueba consistía en la fuerza para partir de... mientras que ésta (la décima según nuestros sabios) consistía en la fuerza para llegar a... a la tierra de Moriáh. Superada esta prueba seguramente el ciclo habrá terminado.

Cuando Abraham partió de su tierra natal lo hizo dejando las extensas llanuras de la Mesopotamia. Ahora el pedido es ascender y elevarse hacia el monte Moriáh.

Prueba superada y elevación son sinónimos en el campo de la semántica hebrea así como en la naturaleza esencial de las cosas. La conexión es clara. La historia de Israel ha entendido este pasaje como prueba y elevación.

Prueba que ha inspirado a centenares de miles de judíos para superar ataduras y sacrificios innumerables.

“Pues en su “sacrificio” hemos sido sacrificados todos nosotros potencialmente.” (Abarbanel)

La importancia de este pasaje en la liturgia judía es determinante.

El mismo forma parte no sólamente de la liturgia diaria, como ya hemos dicho, sino también y especialmente, en la liturgia de los éîéí ðåøàéí — Iamim Noraim.

Por último, después de este evento, distinto de todos los otros, emergirá la figura de Itshak — Patriarca de Israel — ligado al D’s de Israel y a la tierra de Israel que nunca abandonó.

 

1 “ACONTECIÓ DESPUÉS DE ESTOS EVENTOS ...” Después que Abraham había sido bendecido con un hijo en su ancianidad, después que D’s le dijo que su descendencia surgirá de Itshak..., D’s le pidió que se lo dé en sacrificio y Abraham no vaciló...

La intención también quiere decir: después que Ishmahel dejó la casa de Abraham quedando Itshak como hijo único y solo” (Or Hahaim)

 

“...QUE ELOHIM SOMETIÓ A PRUEBA A ABRAHAM...” Existen dificultades en el orden filosófico en cuanto a la comprensión del concepto de prueba por parte de D’s.

D’s no necesita esto para Su propio convencimiento. Nada es desconocido ante Su Omnisciencia. El conocimiento que tiene D’s de las cosas no compele al hombre a actuar. El hombre actúa de acuerdo a su libre albedrío”. (Ran)

Estas dificultades han recibido respuestas distintas de los intérpretes del Tanaj.

Maimónides dice que la prueba persigue un fin: demostrar al mundo que debe obedecer a la voluntad de D’s.

Por lo tanto la finalidad última de la prueba, de acuerdo a la Toráh, es enseñar al hombre qué es lo que se espera de él. (Guía de los perplejos 111:24) Abarbanel sugiere que uno de los propósitos de la prueba es también afirmar, inequívocamente, que existe una creencia firme en la eternidad del alma y su recompensa espiritual.

Sin esta creencia, Abraham no pudo haber intentado el sacrificio de su hijo que dejaría este mundo para siempre. Creyendo en el más allá, sin embargo, él pudo haber reconocido que cualesquiera fueren las implicaciones de su existencia terrena, éstas habrían sido sólamente transitorias. (Abarbanel, ad locum).

Rambán sugiere que la finalidad de la prueba es transformar en hechos el potencial latente en la persona sometida a prueba... Es de notar también que todas las pruebas de las cuales habla la Toráh son pedidas a hombres justos — y no a los impíos — y siempre para beneficio del hombre justo; ya que “Adonai somete a prueba al hombre justo mientras que al impío y al que ama la injusticia, El repudia.” (Salmos 11:5) (Rambán, ad locum).

Por último, los midrashim entienden que el verbo ðñä que traducimos como — probó — puede derivar también del término ðñ  — nes — estandarte — “convirtiendo a Abraham cual estandarte que flamea sobre una nave” (Bereshit Rabbáh — Parashat 55. Párrafo 5)

 

“...Y ÉL DIJO: HEME AQUÍ.” “Así es la respuesta de los hombres piadosos; esta expresión indica modestia y predisposición”. (Rashí)

 

2 “...TOMA, AHORA, A TU HIJO, TU ÚNICO, A QUIEN AMAS...” No ocurre que uno pueda amar a muchos con un amor total, así como no se puede amar muchas cosas juntas; pues ésto se parece a tener preferencias, mientras que es natural que el amor sea dirigido hacia uno... Como dice la Toráh: ama a tu prójimo como a tí..” (Levítico 19:18)

Y la prueba que las Escrituras ofrecen es que inmediatamente de enunciar el “Shemáh Israel”: ùîò éùøàì “—Oye, oh Israel, Adonai es nuestro D’s, Adonai es Único —“ pide la Toráh: ´åàäáú àú ä — Ama a Adonai tu D’s...”

Y es lo que ocurre en este versículo, pues la unicidad (de Itshak) liga a Abraham con su hijo.” (Rabbí Itshak Harama)

 

“...A ITSHAK..."  "...Y finalmente dice a Itshak porque él es esencial en esta prueba; ya que esto contradice la palabra de D’s al decir: ëé áéöç÷ é÷øà ìê æøò. — .. .Pues es por Itshak que tu descendencia portará tu nombre. (Gén 21:12); queriendo insinuar que Abraham pudo haber aducido esta promesa, empero él lo aceptó.” (Rabbí Itshak Harama)

 

“...Y VETE A LA TIERRA DE MORIÁH...” “...Para alejar de él todo apresuramiento, que es el que ocasiona arrepentimiento después — le amplió el camino a tres días ya que en este lapso él podía analizar su acción, en todos sus aspectos y en consecuencia, saber qué debe hacer...” (Rabbí Itsbak Harama)

De acuerdo a la tradición judía, en este mismo lugar ha sido construido el áéú äî÷ãù — el Templo de Ierushalaim. Véase II Crónicas 3:1.

 

“...Y OFRÉCELO ALLÍ COMO HOLOCAUSTO SOBRE UNO DE LOS MONTES QUE YO HABRÉ DE INDICARTE” La no precisión del lugar exacto donde esto ocurrirá nos recuerda el primer pedido a Abraham (en Gén 12:1): “Véte de tu país y de tu lugar natal y de la casa de tu padre, a la tierra que habré de mostrarte.”

Este lenguaje puede ser el lenguaje que crea la aureola en derredor del evento y le confiere su carácter de prueba.

La analogía lingüística es evidente. En ambos pedidos figuran las palabras: ìê ìê que traducimos como: ¡Véte!

 

3 “...SE APRESTÓ Y SE ENCAMINÓ...”

Nótese la ausencia de Saráh en todo este relato. Los midrashim explican este hecho aduciendo que Abraham no quiso herir a Saráh, confiriendo a esta partida un carácter cotidiano y normal.

 

4 “...Y DIVISÓ EL LUGAR DESDE LA LEJANÍA ...“ “El sentido literal de estas palabras es que Abraham divisa la comarca donde estaba el Monte Moriáh, región que seguramente le era familiar.” (Rambán)

De acuerdo a Rashí, él divisó un monte circundado por una nube y entendió que ése era el lugar.

 

5 “...PERMANECED AQUÍ CON EL ASNO ....” “Para que no le impidan ni interfieran en su acto.” (Seforno)

 

“...NOS PROSTERNAREMOS Y VOLVEREMOS A VOSOTROS.” Abraham se despide de sus mozos para el acto más trascendente de su vida con las palabras más simples que un ser humano puede pronunciar.

Entendemos que no hay que tomar literalmente estas palabras: Volveremos a vosotros.

Los sabios del Talmud entienden que esto no es una afirmación racional de Abraham sino una profecía en sus labios; que trasciende tal vez, su propio razonamiento.

En los momentos de elevación las palabras también surgen con elevación.

 

6 “TOMÓ ABRAHAM LA LEÑA PARA EL HOLOCAUSTO, LA PUSO SOBRE ITSHAK — SU HIJO — Y TOMÓ EN SU MANO EL FUEGO Y EL CUCHILLO Y SE ENCAMINARON AMBOS, JUNTOS.” “Abraham hizo esto para despertar el interés de Itshak en los preparativos para que tal vez esto pueda despertar algunas preguntas de Itshak a su padre y que éste pudiera decirle la verdad” (Alshej Moisés)

El fuego: probablemente una vasija conteniendo brasas.

Juntos: “Abraham que sabía que iba a sacrificar a su hijo se encaminaba con la misma decisión y regocijo, tanto como Itshak que no percibía la cosa” (Rashí) En palabras del midrash òå÷ø ïäðò÷ø el padre que iba a atar a su hijo y el hijo que iba a ser atado por su propio padre al altar; ambos se encaminaron en armonía.

 

7 “...Y ¿DÓNDE ESTÁ EL CORDERO PARA EL HOLOCAUSTO?” “Nuestros sabios dicen que Itshak, a la sazón, era de edad de treinta y siete años. Si ésta es la tradición, la aceptamos; aunque por lógica ésto no sería correcto ya que de ser así la justedad y la fé serían de Itshak más que de Abraham, mientras que en el texto (en este orden de cosas) no hay nada acerca de Itshak.

Lo más próximo a nuestro entender es que Itshak tenía trece años. Su padre lo ató a pesar de su voluntad. Y la prueba es que Abraham se lo oculta al decirle: “Elohim proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío”, pues si le hubiera dicho: tú eres el holocausto, es probable que él hubiese huído” (Ibn Hezra).

 

8 “...Y SIGUIERON AMBOS ANDANDO JUNTOS.” Una vez satisfecha la pregunta de Itshak ambos están otra vez juntos y continúan en su camino. Todo lo que sigue es un profundo silencio, ya que no habrá más palabras entre los hombres, solamente-acción.

, âãåìä ùáöò÷åú ùúé÷ä  El clamor más grande y la oración más pura ¿no es el mismo silencio?

 

9 “...LIGÓ A ITSHAK — SU HIJO —...“ El verbo Hakod que traducimos como ligar es el que ha servido de base para el nombre de este pasaje ò÷ãú éöç÷ — la ligadura de Itshak; erróneamente llamado a veces “el sacrificio de Itshak” ya que tal sacrificio nunca tuvo lugar.

 

11 “MAS EL EMISARIO DE ADONAI...” Nótese que si bien en todo el relato D’s aparece con el nombre de Elohim, en este llamado aparece con el nombre de Adonai. De acuerdo a la Tradición Rabínica es el atributo de la Misericordia Divina. Se recalca que el llamado es desde el cielo — aparentemente innecesario — para indicar que no ha habido visión alguna, solamente sonido y voz. (Basado en Radak).

En el versículo primero de este capítulo, Abraham había sido llamado una vez mientras que ahora lo es dos veces, posiblemente para recalcar la premura y el amor de D’s por Abraham.

 

12 “Y DIJO: NO EXTIENDAS TU MANO CONTRA EL NIÑO Y NO LE HAGAS NADA, PUES AHORA YO ME APIADO...” El emisario de D’s habla en Su Nombre y en primera persona, tal como ocurre en Gén. 16:10 con respecto a Hagar.

Por otra parte el midrash en Vaikrá Rabbáh 1:9 dice: ,äîìàê ÷åøà åäãáåø îãáø — El emisario “llama” y la palabra Divina “habla”.

De acuerdo a ésto el emisario únicamente llama a Abraham por su nombre para atraer su atención, mientras que en el resto serán las palabras de D’s mismo. (Jakob Zebi Meklenburg autor de — Haquetav Vehakabbaláh —äëúá åä÷áìä )

 

“...PUES AHORA YO ME APIADO...” Nuestra traducción está basada en el comentario de Rabbí Zebi Meklenburg en su libro

äëúá åä÷áìä . En cuanto al significado amplio del verbo éãò — iadoah — véase nuestra nota a Gén. 18:21.

 

“...YA QUE TEMEROSO DE ELOHIM ERES...” Abraham es conocido en la tradición bíblica como el hombre que amó a D’s. En palabras del profeta Isaías es “linaje de Abraham que me amó” (Isaías 4 1:8)

En nuestro relato D’s mismo lo llama: Abraham, temeroso de D’s.

Entendemos que amor y temor no pueden estar separados.

La relación del hombre como ser humano con D’s infinito y sublime no puede estar basada únicamente en el amor.

Amor sin temor puede ser osadía; amor con temor es amor responsable.

 

13 “ALZÓ ABRAHAM SUS OJOS Y VIÓ Y HE AQUÍ UN CARNERO...” Cuando Hagar erraba por el desierto, a punto de perecer de sed, D’s “develó sus ojos” y ella avistó un pozo de agua (Gén. 21:19).

Abraham, profeta y hombre de fe, no necesita que sus ojos sean develados, él solamente eleva sus ojos, ve y entiende.

 

“...COMO SUSTITUTO DE SU HIJO” El sacrificio se realiza.., en el cuerpo de un animal. El ser humano no tiene que ser sacrificado para D’s. Tiene que vivir ante Su presencia.

 

14 “LLAMÓ ABRAHAM AL LUGAR AQUÉL “ADONAI IRÉ” QUE SE LLAMA HOY: EN EL MONTE DE ADONAI IERAE.” Abraham da un nombre a este lugar pues este sitio, donde D’s se aparece, mantendrá su consagración para toda la posteridad.

Allí será el lugar en donde D’s aceptará las ofrendas y las oraciones de las generaciones futuras. Nótese aquí el juego de palabras. El verbo Raó øàä — ver — pasa de la voz activa a  la pasiva Ieraeh éøàä— D’s se aparecerá, se dejará ver —.

 

19 “VOLVIÓ ABRAHAM HASTA SUS MOZOS Y SE APRESTARON Y PARTIERON JUNTOS HACIA BEER-SHEVAH.” “Itshak no

es mencionado en este regreso, ya que él depende de Abraham y está con él. El que dice que Abraham lo abandonó está diciendo lo contrario del texto”. (lbn Hezra)

Por último nótese que el término éçãéå — juntos — que aparece aquí por tercera vez en este capítulo siempre hace alusión a ambos: Abraham e ltshák.

 

“...HE AQUÍ QUE MILCÁH TAMBIÉN DADO HIJOS A NAHOR, TU HERMANO.”

 

23  “Y BETUEL ENGENDRÓ A RIVKÁH...” No solamente Itshak permanece con vida sino que el texto ya nos relata el nacimiento de la que será su futura esposa: Rivkáh.

La historia no se interrumpe, la descendencia de Abraham a través de Itshak y la que será su esposa Rivkáh está asegurada.

Esta pareja formará el preludio del pueblo de Israel, ya que de ellos nacerá Iahacov.