PARASHÁH: VAIESHEV

GÉNESIS 37:1—40:23

CAPÍTULO 37

 

INTRODUCCIÓN

“Entiendan y razonen los amantes de la razón, lo que enseñaron nuestros maestros cuando dijeron: un versículo no puede ser sacado de su sentido literal.

A pesar de que la esencia de la Toráh viene para enseñarnos y hacernos saber lo que insinúa el texto literal: las interpretaciones agádicas, las halajot (código legal), y los dinim (Leyes) — están involucradas todas — en el estilo idiomático, a través de los treinta y dos principios de hermenéutica de Rabbí Elihezer, hijo de Rabbí Iosi Hagalilí o por medio de los trece principios de hermenéutica de Rabbí Ishmahel.

Empero los sabios primeros, debido a su profunda devoción espiritual, se dedicaron especialmente, a la interpretación (Derash) de los textos bíblicos, dándole carácter de esencial, al Derash, y es por eso que ellos no se ejercitaron en lo que es la “profundidad del enfoque literal” del Tanaj.

Debido a lo dicho por nuestros sabios: “...impedid a vuestros hijos la meditación”. (Meditación en los libros del Tanaj).

Rashí acota al respecto “...que no mediten nuestros hijos en el Tanaj en demasía...” N. del T. basado en T.B. Berajot 28, folio B.

Debido a eso y también debido a lo que dijeron nuestros sabios de que “...el hombre que se dedica al estudio del Tanaj exclusivamente, puede ésta ser, o no, una buena cualidad, empero, el hombre que se dedica al Talmud, no hay cualidad que la supere”.

Debido a todo esto no acostumbraban tanto a descifrar al Peshat (enfoque literal) de los versículos.

Como dice un relato talmúdico, en el tratado Shabbat: “Yo era de la edad de 18 años y había estudiado todo el Talmud y no sabía todavía que un versículo no debe ser sacado de su contexto literal”.

Y también nuestro maestro Shelomó (Rashí) padre de mi madre que iluminó los ojos del exilio (judíos exiliados) escribió una exegésis del Tanaj teniendo la intención de comentar de acuerdo al Peshat (enfoque literal).

Empero yo, Shemuel, hijo de Rabbí Meir (su yerno) de venerada memoria discutí con él y en su presencia (de Rashí) y él me reconoció que si tuviera tiempo debería escribir otro comentario de acuerdo al peshat que se está renovando día a día.” (Esta introducción está basada en comentarios de Rashbam).

 

1 “SE ASENTÓ IAHACOV EN LA TIERRA DE LA MORADA DE SU PADRE, EN LA TIERRA DE QUENA|HAN”. “Después de que la Toráh relata el asentamiento de los jefes de Hesav en el Monte Sehir nos dice que Iahacov por su parte se asenàó en la Tierra de Promisión y éstos son los eventos y los acontecimientos que le acaecen...” (Ibn Hezra).

Traducimos Toledot como generaciones basados en Rashbam.

 

“...EN LA MORADA DE SU PADRE, EN LA TIERRA DE: QUENAHAN”. “Iahacov se asentó en aquella zona de la tierra de Quenahan donde habitaba su padre ltshak”. (Seforno).

Abarbanel establece un estrecho paralelo entre la historia de Itshak y sus vicisitudes con la de Iahacov, pues ambos sufren por las rencillas entre sus hijos. (vg. 1) el rencor de Hesav para con Iahacov y el rencor de los hermanos de Iosef para con él.

2) Itshak sufre por la ausencia de Iahacov durante 22 años, así como la sufrirá muchos años por la ausencia de Iosef.

3) Iahacov, hijo de Itshak abandona la tierra de Quenahan — cruzando el Iardén, sólo con su cayado — y retorna con grandes riquezas, así como Iosef, que descendió a Egipto vendido como esclavo y llegará a ser gobernador en esa tierra. Y es así como Abarbanel quiere entender a la Toráh cuando dice que Iahacov se asentó en “la tierra de la morada de su padre” y ello implica una similitud no sólo de eventos sino de destino.

Más tarde, el Midrash encontrará también una similitud de eventos entre la vida de Iahacov y la de su bienamado hijo Iosef.

 

2 “...Y IOSEF TRAJO HABLADURÍAS ACERCA DE ELLOS A SU PADRE”. Existe una diferencia entre “traer una habladuría” que es contar lo que se ve y “forjar una habladuría”, que es mentir. Por lo tanto no estamos frente a una mentira de Iosef sino frente a una versión de hechos verídicos relatados por Iosef, que puede ser juzgada, para bien o para mal, y él, por su juventud, no previó las consecuencias últimas de su acción. (Basado en Rambán).

 

3 “...HIJO DE SU ANCIANIDAD”... “Ya que él había nacido cuando Iahacov era de edad de noventa y un años y después nació su hermano Biniamín, a quien la Toráh también llama: “Ben Zekunim” — hijo de su ancianidad — (Gén. 44:20)” (Ibn Hezra).

Onkelos traduce Ben Zekunim como: hijo sabio.. La razón del amor especial de Iahacov para Iosef podría deberse, también, al hecho de ser éste hijo primogénito de Rahel, mujer bienamada por Iahacov. Más tarde la Toráh legislará sobre la prohibición al padre de declarar como hijo primogénito al varón nacido de la mujer bienamada preferida.

Así leemos en Deut. 21:15-16: “Si un hombre tuviere dos mujeres, la una amada y la otra aborrecida y le dieren hijos tanto la amada como la aborrecida y fuere el hijo primogénito de la aborrecida, será que el día en que hiciere heredar sus bienes a sus hijos no podrá declarar como primogénito al hijo de la mujer amada, en detrimento del hijo de la mujer aborrecida.

 

“...Y ÉL LE HABÍA HECHO UNA TÚNICA ORNAMENTADA”. Traducimos pasim como ornamentada basados en Ibn Hezra.

Otros comentaristas sugieren que pasim deriva de la palabra pas que en arameo quiere decir: la palma de la mano, indicando que las mangas de la túnica llegarían hasta la palma de la mano y de allí la versión que traduce túnica de mangas largas.

“El hecho de hacer Iahacov una túnica para Iosef quiere significar que él es el dirigente, ya sea en la casa o en el campo.

Como dice el versículo: “Y lo investiré con tu túnica... y tu autoridad le daré en su mano. (Isaías 22:21)”. (Seforno).

 

4 “ELLOS LE ODIARON Y NO PUDIERON HABLAR CON ÉL EN PAZ”. “Quiere decir que lo odiaron tanto que ni siquiera podían oírlo cuando Iosef les decía Shalom: paz: ni podían responderle su Shalom” (Abarbanel).

El odio seguirá creciendo. Los sueños que Iosef amablemente contará a sus hermanos los exacerbarán.

 

5 “...SOÑÓ IOSEF UN SUEÑO...” La historia de Iosef comprende seis sueños que aparecen en tres grupos: dos del mismo Iosef, dos en la historia del copero y panadero de Parhóh y dos del mismo Parhó.

 

Cada grupo de sueños acerca a Iosef a su propia grandeza. Sin embargo, en el libro de Génesis, se distinguen dos categorías de sueños A) Sueños en los cuales D’s habla, B) Cuando D’s habla por medio de sueños.

En la primera categoría D’s se revela y habla ya sea formulando un pedido o advirtiendo alguna prevención.

Estos últimos sueños no necesitan interpretación alguna ya que cada cual entiende el lenguaje de los mismos.

Estos últimos no son “sueños” sino, más bien, palabras Divinas dirigidas a una persona durmiente.

Todos los sueños comprendidos en la historia de Iosef consisten en imágenes y acontecimientos. Ellos también “hablan”, pero existen varias interpretaciones posibles de los mismos. La persona que sueña desea una explicación, ofrecida, preferentemente por un intérprete experto.

Los sueños en los cuales D’s se revela piden acción al hombre, mientras que la segunda categoría de sueños vaticina eventos futuros.

Las diferencias entre los sueños de Iosef y aquellos de los patriarcas están dadas por los respectivos lugares que ocupan en la historia de la religión bíblica.

La cercanía a D’s parece decrecer. El habla con Abraham, con ltshak y con Iafiacov en revelación directa pero ya no más con Iosef. (Basado en Benno Jacob).

 

5 “SOÑÓ IOSEF UN SUEÑO Y SE LO DIJO A SUS HERMANOS Y ELLOS SIGUIERON ODIÁNDOLE MÁS”. “... Y esto es como suelen hacer las personas que aman a o tras, comparten sus sueños con ellas, lo que demuestra que a pesar de que él veía que sus hermanos le odiaban, él los amaba y les contaba sus propios sueños...” (Abarbanel).

Y se lo dijo a sus hermanos: “También esto hizo Iosef por falta de consejo, como joven que era” (Seforno).

 

7 “Y HE AQUÍ QUE NOSOTROS ESTÁBAMOS ATANDO GAVILLAS EN MEDIO DEL CAMPO Y HE AQUÍ QUE SE LEVANTÓ MI GAVILLA Y TAMBIÉN SE AFIRMÓ Y HE AQUÍ QUE VUESTRAS GAVILLAS LA CIRCUNDABAN Y SE PROSTERNABAN ANTE MI GAVILLA”.

Notamos en este sueño varios elementos importantes: la centralidad de la gavilla de Iosef, que lo representa a él mismo; él está firme y erguido, todas las otras gavillas, es decir sus hermanos giran alrededor de él y se prosternan. Esta escena parece vaticinar eventos futuros, ya que los hermanos eran pastores y no agricultores, por lo tanto el sueño no está reflejando una escena cotidiana. Seguramente esto hace alusión a la historia futura de Iosef en Egipto, en la que él salvará del hambre a los habitantes del país y de las comarcas aledañas, acopiando grandes cantidades de granos, en nuestro sueño: gavillas.

Las gavillas de los hermanos, que giran, también pueden hacer alusión a todas las argucias empleadas por ellos para deshacerse de él.

El sueño es nítido. La interpretación clara y obligada.

 

8 “LE DIJERON SUS HEMANOS: ¿ACASO REINAR HABRÁS DE REINAR SOBRE NOSOTROS O GOBERNAR HABRÁS DE GOBERNARNOS? Y SIGUIERON ODIÁNDOLE AÚN MÁS POR SUS SUEÑOS Y POR SUS PALABRAS”. “ "Reinar habrás de reinar? ¿Nosotros habremos de nombrarte rey? ¿O es que tú habrás de gobernar sobre nosotros por fuerza?” (Ibn Hezra).

Este comentario de Ibn Hezra insinúa que los hermanos entienden con claridad el sueño, pero lo ironizan.

Abarbanel sugiere que esta reacción, de los hermanos se debe al temor de la grandeza futura de Iosef en el seno de la propia familia; por ello lo odiaron más, por sus sueños y por sus palabras.

Es probable que ellos hayan pensado que Iosef inventaba sus propios sueños para irritarlos y por eso dice el versículo que lo odiaban, por sus sueños y por sus palabras.

 

9 “SOÑÓ MÁS, OTRO SUEÑO Y SE LO CONTÓ A SUS HERMANOS — DIJO: HE AQUÍ, HE SOÑADO OTRO SUEÑO MÁS Y HE AQUÍ QUE EL SOL Y LA LUNA Y ONCE ESTRELLAS SE PROSTERNABAN ANTE MÍ”.

“En el primer sueño Iosef había visto una escena terrena mientras que la escena, en el segundo sueño, ocurre en el cielo.

Como es usual en los sueños, este sueño parece representar lo imposible, ya que el sol, la luna y las estrellas nunca pueden aparecer juntos.

Sin embargo, los hermanos, temerosos, no hablan ni interpretan pero, posiblemente Iosef, entendiendo que el sol podía hacer alusión a su padre, se lo relató a él — Iahacov — le reprendió diciendo: ¿qué es este sueño que has soñado? queriendo decir: Estas no son más que palabras vacuas’. (Rambán).

 

10 “...LE REPRENDIÓ SU PADRE...” “ Ya que Iosef atraía sobre sí más odio por parte de sus hermanos”. (Rashí).

 

“ VENIR HABREMOS DE VENIR, YO Y TU MADRE Y TUS HERMANOS PARA PROSTERNARNOS ANTE TÍ A TIERRA?

Tu madre ya está muerta, y como ella no puede venir a prosternarse, esto indicaría que todo el sueño es vano. Sin embargo la intención de Iahacov era serenar a sus hijos para que amainaran los celos de ellos para con Iosef (Basado en Rashí).

 

11 “LE ENVIDIARON SUS HERMANOS, MAS SU PADRE AGUARDÓ LA COSA”. “Él estuvo esperando y anhelando cuándo sucedería la cosa” (Rashí).

La traducción de Shamar por aguardar está basada en la obra del filólogo Ibn Janach.

 

“LE ENVIDIARON SUS HERMANOS...” “Al repetirse, por dos veces, los sueños de Iosef los hermanos salen del campo del odio, porque empiezan a creer que tal vez estos sueños encierren un mensaje Divino y por lo tanto, empiezan a envidiar a Iosef por su probable grandeza futura, insinuada en los sueños. Tal vez la intención de Josef haya sido demostrar a sus hermanos que su relación especial con su padre no era casual y, justamente, ante esta situación los hermanos conspiraron contra él” (Abarbanel).

 

“SU PADRE AGUARDÓ LA COSA”. Rashbam sugiere que si bien Iahacov reprendió a Iosef por su sueño, tuvo sin embargo, una actitud interna bien diferente. Probablemente Iahacov empieza a alentar alguna expectativa acerca de la probable grandeza de Iosef, en algún momento de su vida. Y, tal vez, siguiendo esta idea enunciada por Rashbam entenderemos mejor dos actitudes futuras de Iahacov, que transcribimos literalmente: “Rasgó Iahacov sus vestiduras, se puso un saco en sus lomos y se sumió en duelo por su hijo, muchos días. Se levantaron todos sus hijos y todas sus hijas para consolarle, mas él se negó a ser consolado. Y dijo: Pues habré de descender hasta mi hijo — en duelo — al sepulcro”. Y le lloró a él su padre”. (Gén. 37:34-35).

“Dijo Israel: ¡suficiente! Todavía Iosef, mi hijo, está vivo... (Gén. 45:28).

La seguridad de Iahacov al creer de inmediato que Iosef vive, a pesar de haber visto su túnica desgarrada y ensangrentada y de haber declarado que Iosef fué devorado, emana, posiblemente, de la veracidad que Iahacov atribuye a este sueño.

 

12 “FUERON SUS HERMANOS A PASTOREAR LAS OVEJAS DE SU PADRE, EN SHEJEM.” Existen dos formas de entender los relatos comprendidos bajo el título de: Iosef y sus hermanos. Una forma es creer que se trata, únicamente, de un capítulo de celos, rencillas y sus consecuencias entre hermanos — cosas que en realidad han ocurrido.

Y la otra forma es ver estos relatos como un eslabón más en la apasionante historia del pueblo de Israel. Historia que se inicia con Abraham y que culminará en su primera etapa, con el regreso de la descendencia de Abraham como pueblo de fé y como nación a la Tierra Prometida por D’s a Abraham y su descendencia.

Nuestros sabios lo manifiestan. En palabras del Midrash, que comentando el versículo: “Se asentó Iahacov en la tierra de la morada de su padre” acota: “Intentó Iahacov asentarse en quietud en la tierra de la morada de sus padres, pero sobrevino sobre él la tensión de la historia de Iosef.”

La historia de un pueblo no puede forjarse en quietud y en paz, deberá culminar en quietud y en paz, pero los eslabones intermedios son de tensiones, angustias, vicisitudes, lágrimas y alegrías.

D’s le había dicho a Abraham que su descendencia sería extranjera en una tierra ajena. Eso no condice con el intento de asentamiento de Iahacov.

Por lo tanto D’s, rector de la Historia y conductor de la misma, moverá a las personas y a las familias en dirección a “esa tierra extranjera”.

Tal vez sean los sueños de Iosef la misma historia del pueblo de Israel anticipada.

Historia de un pueblo que se desarrolla en dos planos: en los cielos y en la tierra, como los sueños de Iosef.

Así como Iosef es víctima de sus hermanos por el solo hecho de soñar, inspirado por D’s, por supuesto, así la humanidad intentará convertir a Israel en su víctima, por el hecho de traer al mundo el mensaje de D’s, por el hecho de ser puente entre el cielo y la tierra.

Tal vez Iosef, con su propia vida, protagonice el sentido real del sueño de Iahacov, su padre, cuando vio la escalera que unía el cielo con la tierra.

Sigamos a Iosef y acompañándolo descubriremos nuestra propia historia.

Y es por eso que los sabios del Midrash dicen que en realidad los hermanos de Iosef fueron no a apacentar las ovejas sino a apacentar sus pasiones y rencores.

Los sabios de la Massoret marcan esta posibilidad interpretativa puntuando la palabra et del versículo “lirhot et ison avihem” — apacentar a las ovejas de su padre — queriendo decir que fueron a Shejem con otro propósito, distinto del aparente. Estas reflexiones pueden encontrar apoyo en las últimas palabras de Iahacov en su lecho de muerte cuando dijo: “Reuníos y os anunciaré lo que habrá de acontecer a vosotros en la postrimería de los días”.

Allí culmina la historia de Iahacov y de Iosef dando comienzo a la historia de Israel. “La postrimería de los días” cierran este capítulo de la Historia de los patriarcas.

El libro de Éxodo dará comienzo a la historia del pueblo de Israel.

 

13 “DIJO ISRAEL A IOSEF: CIERTAMENTE TUS HERMANOS ESTÁN PASTOREANDO EN SHEJEM. VÉ Y TE ENVIARÉ HACIA ELLOS. Y LE DIJO: HEME AQUI”: Los hermanos de Iosef se alejaron, posiblemente, hasta Shejem, para no convivir con Iosef, a quien odiaban: sin embargo Iahacov quiere restablecerla paz entre sus hijos y enviará a Iosef a ver por la paz de sus hermanos.

Iosef conoce la situación y va hacia ellos “aunque sabía que le odiaban” (Rashí).

Iosef como Abraham en su momento, cuando D’s le pide a su hijo Itshak contesta con la palabra Hineni. — En realidad Abraham y Iosef, después de esta palabra, marcharon hacia destinos difíciles. Esta será la última palabra que Iahacov escuchará de Iosef por muchos y largos años.

Recuérdese que Shejem era una zona de peligro, por todo lo relatado en el capítulo 34.

 

14 “...Y TRÁEME AL REGRESO ALGUNA PALABRA..” " Constata la paz de tus hermanos, ya que ellos están en un lugar de peligro — Shejem — pero de inmediato regresa hacia mí con un mensaje y quédate conmigo, no con ellos.

Debido a su amor por Iosef Iahacov lo acompañó desde Hebrón hasta el valle que circundaba la ciudad y desde allí lo despidió, en su camino hacia Shejem” (Abarbanel).

 

“...Y LLEGÓ A SHEJEM”. “Y no los encontró”. (Rashbam).

 

15 “LE ENCONTRÓ UN HOMBRE — Y HE AQUÍ QUE ESTABA EXTRAVIADO EN EL CAMPO”... “Iosef caminaba sin rumbo y se internó en el campo, pues él buscaba a sus hermanos en algún lugar de pastoreo.

La Toráh relata minuciosamente todos estos acontecimientos de la vida de Iosef para demostrarnos cuantas dificultades tuvo que sortear para cumplir con el pedido de su padre, ya que pudo haberse vuelto al no encontrarlos.

Y también la Toráh nos indica que D’s le envía un “guía” para hacerlo llegar al lugar donde debía llegar y ésta es la intención de nuestros sabios cuando nos dicen que “estos hombres” que aparecen de pronto en los relatos bíblicos son malajim — mensajeros de D’s — pues el relato

quiere enseñarnos que los designios de D’s se cumplen (Rashbam — Rambán).

 

16 “...A MIS HERMANOS YO ESTOY BUSCANDO...” Aquí vemos la grandeza de Iosef. Sus hermanos se alejan cada vez más de él. El sigue acercándose cada vez más a ellos. Para él siguen siendo sus hermanos.

Un hermano no puede responder al odio con más odio. Un hermano debe seguir siempre en pos de sus hermanos, a pesar de ellos en nuestro caso.

 

“...DIME, AHORA, DÓNDE ESTÁN PASTOREANDO”. “Si es que lo sabes”. (Ibn Hezra).

 

17 “...DOTÁN”. Dotán es una localidad que está mencionada otra vez en II Reyes 6:13.

No busques a tus hermanos en esta zona pues yo escuché que ellos decían: vayamos a Dotán. No los he visto, sólo los he escuchado”. (Seforno).

 

19 “DIJERON EL UNO AL OTRO: HE AQUÍ, EL HOMBRE DE LOS SUEÑOS ““El que nos relataba los sueños para enfurecernos” (Seforno).

 

20 “Y AHORA VENID, MATÉMOSLE Y ARROJÉMOSLE EN ALGUNA DE LAS CISTERNAS Y DIREMOS: UNA FIERA SALVAJE LE HA DEVORADO”... “No sea que nuestro padre se enoje con nosotros y nos maldiga” (Seforno).

 

“...¡Y VEREMOS QUÉ SERÁN SUS SUEÑOS’ Esto es una burla, “pues después de su muerte no podremos venir a postrarnos ante él como él había soñado”. Los hermanos de Iosef desdeñan a Iosef y a sus sueños y parecen también desafiar, desdeñosamente, a D’s, que ha originado esos sueños.

Los proyectos de los hombres son muchos, mas los designios de D’s son los que se afirmarán.

Nótese que el versículo empieza casi con la palabra sueño y termina con la palabra sueño.

Los sueños ajenos perturban la quietud de estas personas.

 

21”... LE LIBRÓ DE MANO DE ELLOS”... “Al impedir la acción impetuosa y brusca que genera injusticias irreversibles y en la cual incurre también a veces el hombre justo. Tal como ocurrió con Reubén en el caso de Bilháh. (Gén. 35:22 (Seforno).

Rashbam dice que Reubén lo libró de la muerte. No es liberación total pero Reubén trata, por lo menos, de mantenerlo con vida.

 

“LO ESCUCHÓ REUBÉN Y LE LIBRÓ DE MANO DE ELLOS. DIJO: ¡NO ATENTEMOS CONTRA SU VIDA’ Esta primera “recomendación moral” de Reubén no fue aceptada por sus hermanos.

El silencio de ellos indica el rechazo a la misma.

 

22 “LES DIJO REUBÉN: ¡NO DERRAMÉIS SANGRE! ¡ARROJADLE A ESTA CISTERNA QUE ESTÁ EN EL DESIERTO, MAS LA MANO NO TENDÁIS CONTRA ÉL! PARA LIBRARLE DE MANO DE ELLOS, PARA DEVOLVERLE A SU PADRE”. Esta intervención de Reubén en favor de Iosef es más clara aunque no más enérgica. Reubén interviene pero no enfrenta totalmente a sus hermanos.

No obstante la Toráh capta y relata la intención profunda de Reubén.

“El quería devolver a Josefa su padre y, tal vez con ello, reparar la grave falta cometida por Reubén con Bilháh — esposa de su padre — Véase Gén. 35.22”. (Abarbanel).

Por otra parte es probable que siendo Reubén el primogénito actuara en función de su responsabilidad especial.

 

23 “...DESPOJARON A IOSEF DE SU TÚNICA”... “Si bien esta túnica es la que causa “aparentemente” el odio de los hermanos para con Iosef, la intención al despojar a Josef de su túnica sería la que aparece explicitada en los versículos 31- 33: esta túnica empapada en sangre será la prueba que los hermanos ofrecerán a Jahacov, su padre. acerca de la desaparición de Iosef’ (Rashbam).

 

24 “LE PRENDIERON Y LE ARROJARON A LA CISTERNA MAS LA CISTERNA ESTABA VACÍA, NO HABÍA EN ELLA AGUA”. “Ya que de haber habido agua en la misma no lo habrían arrojado, porque ellos no lo querían matar con sus propias manos.” (Rashbam y Rambán).

 

“...NO HABÍA EN ELLA AGUA”... “Pero serpientes y víboras había”... (Talmud y Midrash).

 

25 “SE SENTARON PARA COMER PAN”. “Y todos estos eventos no les fueron obstáculo que les impidiera comer” (Seforno).

 

27 “VAMOS, VENDÁMOSLE A LOS ISHMEHELIM”... “Y por ello Iehudáh propone ésto: ya que la caravana va a una tierra lejana, podremos venderlo sin que se sepa la cosa”. (Rambán).

“Y le pagaremos con la misma moneda, él será esclavo, ya que él quiso dominarnos a nosotros”. (Seforno).

 

“...PUES NUESTRO HERMANO, NUESTRA CARNE ES...” Las palabras de Reubén producen alguna conmoción en Iehudáh. Las palabras de Iehudáh no van dirigidas a la emoción sino a la razón, ya que dejar a Iosef abandonado en una cisterna en el desierto equivale a matarlo y de allí la propuesta de Iehudáh.

 

28 “EMPERO, PASARON HOMBRES MIDIANIM — MERCADERES...” Este texto ha sido tradicionalmente entendido como que los hermanos de Iosef lo vendieron. Y así es conocida la historia de Iosef. Sin embargo, esta afirmación carece de asidero en el texto.

En palabras de Rashbam lo que habría ocurrido es lo siguente: “...pasaron hombres midianim mercaderes, . . . Los hermanos estaban sentados

comiendo a cierta distancia de la cisterna, para no hacerlo cerca del lugar de la “sangre de su hermano” y esperaban a los ishmehelim, a quienes habían divisado viniendo en caravana. Mientras tanto pasaron otros hombres midianim, mercaderes, cerca de la cisterna, lo vieron a Iosef en ella, tiraron (algún cordel) lo sacaron, y lo vendieron, luego a los ishmehelim de la caravana. Es lo que dice el texto. Y los ishmehelim, en definitiva, lo trajeron a Egipto donde a su vez fué vendido a Potifar, Gén. 39:1.

Esto me parece que es lo que dice el texto en su profundidad”.

Y si tú, lector, encontrares dificultades en las palabras siguientes: “... Yo soy Iosef vuestro hermano, el que habéis vendido a Egipto”. (Gén. 45:4), eso sólo quiere decir “que habéis causado mi venta por medio de vuestras acciones”. (Rashbam). Por otra parte, cuando Iosef mismo relata la forma por la cual él había llegado a Egipto dice: “Pues robar he sido robado de la tierra de los hebreos... (Gén. 40:15).

Por último sólo así entenderemos la sorpresa de Reubén: “Volvió Reubén a la cisterna y he aquí que no estaba Iosef en la cisterna y rasgó sus ropas. Volvío a sus hermanos y dijo: “El niño no está y yo, pues, ¿dónde voy yo?” (Vers. 29 y 30).

Mientras los hermanos se quedaron comiendo, Reubén usó ese tiempo para intentar rescatar a Iosef.

La desesperación de Reubén es grande y rasga sus ropas, como suelen hacerlo las personas sumidas en duelo.

Regresa a sus hermanos y les relata lo ocurrido; cosa ésta que corrobora aún más el hecho de que no fueron los hermanos los que, en definitiva, lo vendieron.

En otro orden de cosas, llama la atención el hecho de que la Toráh no nos relata ni una sola palabra acerca de las reacciones o resistencias de Iosef. Esto no es una omisión, de ninguna manera; sin embargo, años más tarde cuando los hermanos de Iosef habrán de venir a Egipto a comprar trigo, y ante las vicisitudes sufridas por ellos, ellos mismos nos relatan con carácter tardío, tal vez, pero mucho más significativamente, las reacciones de Iosef.

En palabras del texto: “Dijeron el uno al otro: “Empero culpables somos nosotros por causa de nuestro hermano, pues habíamos visto la angustia de su alma, en su implorar a nosotros y no lo hemos oído. Por eso nos ha sobrevenido esta tribulación”. (Gén. 42:21).

Reubén, como primogénito, se siente más responsable por la vida de Iosef, ante su padre Iahacov, y piensa que él deberá cargar con mayores responsabilidades por su desaparición.

 

31 “TOMARON LA TÚNICA DE IOSEF, DEGOLLARON UN CABRITO Y EMBEBIERON LA TÚNICA EN LA SANGRE.

ENVIARON LA TÚNICA ORNAMENTADA Y LA TRAJERON A SU PADRE Y DIJERON ESTO HEMOS ENCONTRADO, RECONOCE AHORA, SI ES LA TÚNICA DE TU HIJO O NO”. De acuerdo al Targum de Ionatán Bea Huziel los hermanos de Iosef habrían “enviado” la túnica ensangrentada por medio de alguno de los hermanos (los hijos de Zilpáh y de Bilháh) después el resto de los hermanos se unió a ellos. Los comentaristas Rambán, Abarbanel y Seforno dicen que el significado del verbo Shaleah, en este contexto, deriva del sustantivo Shelah — arma filosa — que significa: cortar con el arma filosa, o sea que ellos simulan el ataque de la “fiera salvaje al cortar la túnica con un arma filosa . ensangrentarla.

 

33 “...DESPEDAZAR HA SIDO DESPEDAZADO IOSEF”. Todo resulta de acuerdo a lo planeado por los hermanos.

 

34 “...MUCHOS DÍAS...” La Toráh quiere significar con esto que Iahacov, si bien observa el duelo, como era costumbre, no se limita a un período de duelo limitado, ya que la palabra Iamim (éîéí)  en el Tanaj tiene también connotación de años.

 

35 “SE LEVANTARON TODOS SUS HIJOS Y TODAS SUS HIJAS...” Iahacov tenía una sola hija llamada Dináh. Por eso Rashí dice que aquí las nueras son llamadas hijas.

 

“...AL SEPULCRO”... Sheol: quiere decir sepulcro.

En este sentido el término está utilizado en varios lugares del Tanaj. — Ibn Hezra.